Speed Dating for Dummies

Por Sophia Guida

Cuatro minutos. Cuatro minutos para discutir y presentar completamente a mí mismo, y, sí, tal vez hablar de la vida de la otra persona también. Tanta presión.

"Yo tocaré este silbato, no importa cuán bonita es la fecha, se acabó y y'all que seguir adelante", dijo el anfitrión de la fiesta, dice.

Fui a un evento de citas rápidas en Filadelfia con un grupo de amigos de Bryn Mawr. Hemos tenido diversos grados de inversión en el caso-algunos fueron en busca de amor, algunos en busca de nuevos amigos. Me? Estaba a lo largo del paseo. Mi amigo había encontrado el evento en línea, en un sitio llamado HurryDate, completamente dedicado a la datación de la velocidad en el área de Filadelfia.

Habíamos caminado hacia la Casa de Campo Bar, cerca de la estación de Oriente de mercado a través de la lectura de Terminal Server. Una azafata nos saludó en la entrada y nos condujo a la sala VIP detrás de la barra, con poca luz para crear un ambiente un tanto romántico. Hemos firmado y recibió una tarjeta de identificación con un número. Mesas de madera de dos anillos de la habitación. Elegí uno cerca de la pared y se sentó con mi especial de velocidad-Fechadores-Margarita de precios (el exceso de sal), en espera de la velocidad de otras personas que se citan en llegar.

Cuando empezamos, los participantes varones distribuido alrededor de la sala de cuatro minutos fechas en los distintos cuadros, mientras que las mujeres se quedaron. Después de cada fecha, hemos hecho una marca después del nombre de cada participante, ya sea para "Sí, me interesa", o "De ninguna manera en el infierno."

"Sí, estoy interesado" no significa exactamente el matrimonio, sólo que había una buena fecha. Más tarde, se nos dijo que podíamos ir en línea y enviar solicitudes de información adicional a través de la base de datos HurryDate - probablemente para proteger contra la posibilidad de acoso o por otros acontecimientos desagradables.

Y ¡qué alivio! Aunque algunas de las fechas que tenía eran perfectamente encantador y agradable, otros eran francamente deplorable.

Nota para los aspirantes a la velocidad-personas que se citan: no es exactamente una buena idea, al enterarse de que la fecha es en el Bryn Mawr, para preguntarle si ella es bisexual.

Además, puede que no sea la mejor idea a la proposición de la fecha al final de la tarde. Nosotros no le gusta eso.

Tal vez sería mejor encontrar un interés común. Vamos a ver ... me gusta viajar, y me gusta las artes marciales. Que parecía funcionar bastante bien. Me referí a la procedencia de los vinos locales de Barcelona con una fecha, aprendí a contar hasta 10 en China con otro, y el brazo-luchó con un chico de Lituania.

Por supuesto, la cosa de viajes puede resultar contraproducente. En un momento me encontré en la mesa de un tipo que me trató de entablar un debate agresivo sobre el conflicto israelo-palestino. En cuatro minutos. Definitivamente un "no" marca para él.

Mis amigos tenían algunas buenas historias también. Israel-Palestina entusiasta le dije a mi amiga que debe simpatizar con la difícil situación de los Judios de Rusia.

Uno de los personajes, al enterarse de que mi amigo quería llegar a ser un terapeuta, dijo en un acento grueso de Ucrania, "Usted puede aconsejarme cuando quieras."

Ese mismo hombre le dio a mi otro amigo, un concurso improvisado sobre la geografía de Europa Oriental y trató de convencerme de ir a casa con él.

Además de la perspectiva de la reducción de las bebidas de los precios, lo que podría tener a alguien a poner su sí mismo a través de la prueba de citas rápidas?

"Es una manera eficaz de conocer gente", dijo un participante femenina, que proclamó que era su velocidad trigésima vez de citas.

Otros citaron el caso como un medio de ampliar los círculos de amistad existentes. Un par de ingenieros nos invitó a tomar una copa después, diciendo que sólo llegó a conocer gente nueva. Parecían perfectamente contento de haber recogido a un grupo de niñas Bryn Mawr, aunque sólo sea por nuestra compañía encantadora. Pedimos una nueva ronda de bebidas y se echó a reír a nosotros mismos tonto.

Tengo que admitir que fue una noche entretenida.

Veinte fechas. Cuatro minutos cada uno. Tanta presión, pero un montón de entretenimiento. No está mal.

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